Cómo limpiar mi tortuga

Lo primero para limpiar una tortuga es encontrar un recipiente adecuado en el que preparar el baño de tu tortuga. Llénalo de agua tibia y después hazte con un cepillo de dientes suave. Estos son los elementos que necesitarás para el cuidado de tu tortuga.

El siguiente paso consiste en sacar a la tortuga de su hábitat. Si está sucio puedes aprovechar para limpiarlo también. La higiene de su hogar es primordial. A continuación introduce a tu mascota en el recipiente con agua tibia, donde disfrutará de su baño.

Moja el cepillo de dientes en el agua tibia. Frota las zonas sucias del caparazón de tu tortuga, hazlo suavemente. Puedes mojar de vez en cuando la zona con un poco del agua del recipiente. No olvides limpiar los huecos, donde suelen colarse algas.

Por ninguna razón obligues a salir a tu tortuga de su caparazón en caso de que esté escondida. Respeta la decisión de tu mascota y continúa limpiándola con suavidad. Si no llegas a algún área, déjalo estar, pero no fuerces a la tortuga.

Por último, enjuaga con agua tibia y con suavidad a tu mascota cuando consigas que quede libre de algas. A continuación introdúcela nuevamente en su hábitat. ¡La tortuga estará reluciente y se sentirá muy agradecida por el delicioso baño!

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• Las tortugas de tierra eben limpiarse suavemente con un cepillo, realizando movimientos circulares sobre su caparazón. Ponla bajo el agua y no mojes su cabeza. La piel se limpia frotando con los dedos de manera suave. Seca su caparazón ayudándote de papel higiénico y hazla caminar sobre papel de periódico.
• Las tortugas de agua deben tener un acuario limpio. Saca a la tortuga de su hábitat y límpialo. Después limpia a tu mascota con agua dulce y fresca. Trata de no mojarle la cabeza ni de tocar su piel.