Cómo saber si mi gato tiene moquillo

El moquillo felino, conocido médicamente como panleucopenia, es una enfermedad de contagio viral que afecta el sistema nervioso, digestivo y la médula ósea del gato, comprometiendo de forma severa su salud y pudiéndolo conducir incluso a la muerte.

Esta enfermedad se contagia mediante contacto directo con el virus, que puede encontrarse presente en otro gato, en la madre del felino, en el exterior, pues está presente en el ambiente, o en fluidos infectados como puede ser el agua que bebe nuestro animal.

El moquillo felino es una enfermedad que puede prevenirse si seguimos el calendario de vacunación de nuestro gato, especialmente si el mismo es completamente doméstico. Sin embargo en animales que se encuentran en albergues de mascotas o en aquellos que salen de casa y transitan libremente teniendo contacto con otros felinos, puede ser más difícil de prevenir.

Los síntomas del moquillo felino que se presentan en la primera etapa pueden ser confundidos con los de otras condiciones, como una intoxicación o una infección. Sin embargo es bueno que tengas claro que por sí solas esta señales son lo suficientemente alarmantes como para que lleves a tu gato al veterinario, por eso no conviene esperar mucho tiempo hasta que los síntomas avancen.

Durante los primeros días de contagio tu gato puede presentar

• Diarrea importante
• Vómitos
• Fiebre
• Falta de apetito
• Apatía y tristeza
• Secreción nasal
• Deshidratación

Si el virus continua avanzando entonces tu animal pudiera manifestar:

• Convulsiones
• Ataques a si mismo mordiendo su cola o distintas partes de su cuerpo. Ambos síntomas ocurren en una etapa crítica de la enfermedad.

Es bueno comprender que siempre que nuestro gato presenta algún síntoma de enfermedad, por ejemplo diarrea severa, fiebre o vómitos que no disminuyan tras 24 horas, debemos llevarlo de inmediato a un veterinario para una revisión.

El moquillo no es un virus que desaparece por si solo, por el contrario es un virus que puede matar a tu animal rápidamente, por lo que si sospechas que tu gato tiene moquillo debes llevarlo cuanto antes al veterinario.

El moquillo felino es muy común en gatos menores a 5 meses, en aquellos que no han sido vacunados contra la panleucopenia, los gatos enfermos y quienes están en contacto directo con otros felinos que pueden contagiarlos, algo muy común en los animales de albergue o los gatos callejeros.

No existe un tratamiento propio para el moquillo felino ya que ningún medicamento puede eliminar el virus. Sin embargo la atención médica centrada en reducir los síntomas, hidratar al animal y ayudarle en su recuperación, puede salvar su vida. Una vez que el gato ha superado los primeros 5 días con moquillo, sus posibilidades de sobrevivir aumentan. Es fundamental visitar a un especialista para recibir las recomendaciones y medicamentos pertinentes para intentar luchar contra este virus.

La mejor forma de prevenir el moquillo felino es vacunando al animal contra el virus de la panleucopenia, que se encuentra entre las vacunas obligatorias presentes en el calendario de vacunación recomendadas para garantizar la salud de tu gato.

Si tienes varios gatos y alguno de ellos ha contraído este virus, será importante aislarlo en un ambiente agradable pero alejado de los otros animales para evitar el contagio. Consulta a tu veterinario acerca de las medidas más convenientes a poner en práctica para prevenir que el resto de tus gatos contraigan moquillo.

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